jueves, 7 de abril de 2016

En la penumbra de la muerte

Hoy fui seleccionada por un grupo de seres de otro planeta, me han raptado para ser pruebas con mi cuerpo y así saber más de la anatomía del hombre. 
Estoy atada de manos y piernas, me duele la presión que se da por la unión de las ataduras, la sangre empieza a rodar en pequeñas gotas. Mi mente se nubla y aclara en pocas veces, llegó a sentirme mareada y la vista empieza a fallecer. 

¿Qué tanto tiempo llevo aquí? me pregunto. Razonando la respuesta entro en la alucinación de un rescate, del deseo de tener seres que me extrañen. que al enterarse se desvivan y pierdan el sueño buscando la estrategia de  salvar mi vida. Claro, lo que quiero en un súper héroe a mi lado.

Despierto de la alucinación y me quedó pensando, si no tengo ese héroe, ese príncipe que rayos me ata querer estar en la tierra, y aquí inicia la lucha, la lucha de mis pensares. No tengo con quién formar una familia, me encuentro sola, sin la figura de aquella media naranja que envejezca a mi lado y compartamos historia juntos. Reacciono y me doy cuenta que le estoy dando más importancia a este otro humano que a mi misma.

6876725814_9901a7a673_b.jpg (1024×768)¡Basta! ¿Qué pasa conmigo? ¡Que ridiculez pensar en otra persona más que en mi misma! Porqué debo pensar que estar con alguien a mi lado me llevará a vivir más plena mi vida, si viéndolo bien, los años que tengo en vida me han dado buenos momentos y los momentos menos agradables hoy por hoy me han hecho ser más fuerte y por ende esto se convierte en un punto a favor. Las amistades obtenidas que aun mantengo y las que fueron fugaces puedo decir que es otra maravilla plena de mi vida, mi familiares son pilares que se mantienen, algunos muy rígidos y fuertes, sé que con ellos contaré por mucho tiempo y otros ya muy desgastados por falta de mantenimiento, pero pilares como todos. He conocido muchos lugares, muchos ambientes y he disfrutado cada uno de ellos. Me he llenado de diversos conocimientos, que alimentan la sensación de ser capaz de aplicar para cualquier ocasión y aún aplicándolas sigo adquiriendo conocimiento. 


Soy muy dichosa, y no necesito alguien que me rescate, espero que éste ser de otro mundo que me haya tomado, sepa apreciar lo que se ha raptado, que al abrir mi cuerpo pueda recibir todo lo que llevo y pueda disfrutar lo que transmito. Me siento placentera y no temo que encuentren en mi todos estas riquezas. Afirmo que ya me siento preparada para ser tomada, este es mi fin.